La ley de la gravedad es para todas

Uno de los temas tratados durante la sobremesa, de la pasada cena de Navidad de la empresa, y una vez que las copas iban desinhibiendo al personal, fue el si, con los años, las tetas operadas, también caen, o, como algunos incautos sostenían, se mantienen erguidas, desafiando permanentemente, la ley de la gravedad.

Pues bien, siendo ese tema, algo que las mujeres conocemos muy bien, tengo que decir, aquí y ahora (no iba a decirlo durante la cena, para que se riesen aquellos palurdos salidos), que:

• Una cosa es que tumbada de espaldas, tal y como puede apreciarse en verano en cualquier playa, las tetas operadas permanezcan verticales, ya que es la prótesis la que no se expande hacia los lados, aplanándose con ello, tal y como les ocurre a las tetas naturales.

• Otra cosa muy distinta, es que, estando de pie, las tetas operadas, al igual que pasa con las no operadas, con los años, tienden a caer, pues el músculo que las sujeta (pectoral) se relaja (efecto que puede contrarrestarse con un sujetador, que de ahí precisamente le viene el nombre)
  

Y como más vale una imágen, que mil palabras, aquí van un par de imágenes de Pam Anderson (la superfamosa vigilante de la playa), en la que podemos apreciar ambas cosas:

• Tetas erguidas al estar tumbada de espaldas.

• Tetas operadas, que al cabo de 16 años, tienden a caer, aunque seas vigilante de la playa.

Y con esto, queridos papanatas, concluye por hoy, la lección de la Dra. Amor

;-)