domingo, 23 de noviembre de 2014

Cate Maynes ha vuelto

Para quienes no la conozcan, diré que Cate Maynes es una detective privada, expolicía, de desastrosa vida sentimental, la cual ella trata de olvidar, arrastrándose de cama en cama, de mujer en mujer, de barra (de bar) en barra (de bar), y de borrachera en borrachera.

Pues bien,
meses atrás, leyendo el Blog de Clara Asunción García, supe que la segunda entrega de Cate Maynes, titulada Los hilos del destino, estaba a punto de publicarse.

 

Una vez publicada (por editorial Egales), adquirida (en una de mis librerías favoritas) y leída casi de tirón (esta novela es de las que engancha), comentaré que en esta segunda novela protagonizada por Cate, se mezclan dos historias: la que ocurre en su vida profesional de detective, para localizar al desaparecido hermano gemelo de su cliente, y la que ocurre en su complicada vida privada y sentimental, historia ésta segunda, que en esta ocasión me ha parecido más romántica que la de la primera novela, y que me ha encantado.
 (me da igual que me tachen de romántica incorregible). 

La novela tiene además las inconfundibles “marcas de la casa” Cate Maynes, es decir:
  • Los toques de humor y la fina ironía, tanto en los pensamientos y las reflexiones de la protagonista, como en las frases de alguno de los peculiares personajes con los que ella se encuentra (por ejemplo, en el capítulo 17, la dueña del hostal al que acude en el transcurso de su investigación).
  • Las escenas amorosas de Cate, que siguen siendo de un erotismo, que hacen que, al leerlas, te entre el sofocón total (y aquí os remito al capítulo 7). 

Tema aparte es el de que Cate siga autodefiniéndose como una imbécil, aunque yo creo que algo ha madurado respecto de su primera aventura (a mí al menos, me parece que lo ha hecho), aunque bien pudiera ser, que lo que hubiese ocurrido fuese, lo que decía el epicúreo (por sus gustos por el sexo, la bebida y la comida) detective privado Pepe Carvalho, en la novela Los Mares del Sur: "Los treinta años, es la edad en que el ser humano deja de ser un imbécil, y a cambio paga el precio de empezar a envejecer".

Quizás sea, porque este desastre de mujer llamada Cate se hace querer por quienes leemos sus aventuras, pero creo que si consiguiese aclarar y ordenar un poco su vida sentimental, y comenzase a comer y beber de forma más correcta y saludable, tal y como una y otra vez le recomienda Caroline, su amiga, confidente, paño de lágrimas, enfermera, cocinera-dietista y dueña del Powanda, veríamos finalmente a una epicúrea detective privada (la cabra siempre tira al monte, que decía mi abuela), al estilo de Pepe Carvalho, con unos toques de humor, que aquel no tenía, aunque no tan radicalmente gourmet como él, pero sí con más delicadeza (vamos, que no me la imagino abandonando en la cama a su amante, para dirigirse a la cocina, a añadirle fumet de pescado a un roux, y preparar la salsa velouté con la que napar unos canelones de marisco).  
 :-)


Resumiendo: Otra magnífica y entretenida novela de Clara Asunción García, protagonizada por la detective privada Cate Maynes,  y con un sorprendente final, o, para ser exacta, con dos finales sorprendentes, pues ya decía antes, que en esta novela se mezclan dos historias. 
(el final de la historia privada, es de los que deja con la miel en los labios)
;-)

Por cierto, y para terminar este post: sabemos que Clara recogerá las aventuras de Cate en 6 novelas, de las cuales ésta es la segunda,
Si hiciésemos la estimación de que las próximas no tardarán tanto en salir como ésta (la primera novela se publicó en 2011), y digamos, por ejemplo, que de una a la siguiente pasarán 2 años, llegamos a la conclusión de que tenemos aventuras de Cate Maynes, para otros 8 años más, y en los que veremos cómo, con la edad, ¿y la madurez?, evoluciona nuestra querida detective, y qué final tienen pensado Clara y Cate.
(personalmente prefiero los finales felices, o, en todo caso, los de mutis por el foro de las protagonistas, desvaneciéndose en la geografía y en la historia, que no cosas radicales como el de la película Thelma y Louise).
  ;-)

En cualquier caso, esperaremos para verlo, leerlo y disfrutarlo.

domingo, 24 de agosto de 2014

Me encantan las verbenas de agosto

He de reconocer, que ¡No hay nada como una verbena privada en una discreta terraza, una tranquila noche del mes de agosto, cuando las grandes ciudades se han quedado medio desiertas!

Copa(s), buena música, baile, y hasta sonido de cascabeles.


PD:   Y hasta aquí puedo leer.

;-)

jueves, 21 de agosto de 2014

Y si antes lo digo...

Aprovechando días de vacaciones, ayer fui de compras a un conocido centro comercial de Barcelona.

Al salir, y mientras que me dirigía a la parada de autobús, me fijé en un cartel que una tal Alicia, había pegado en un semáforo, dando sus datos de contacto, por si acaso alguién hubiese encontrado su Smartphone (Samsung Galaxy), que esa mañana, ella había perdido en esa zona.

Pero si la nota ya era llamativa en sí misma  (por lo que dije hace algunas semanas acerca de que los Smartphones se pierden, los olvidas, te los roban, etc), lo que realmente me llamó la atención del cartel, era que pedía que, quien lo hubiese encontrado, si no se lo devolvía, que al menos le devolviese la tarjeta SIM y las fotografías que iban en el Smartphone.




¡¡Espero que se lo devuelvan, y también espero que esas fotografías, que pide que le devuelvan, no fuesen del tipo que decía en mi post acerca de los Selfies Eróticos!!.



domingo, 17 de agosto de 2014

Negociando la cenita de agosto

Tal y como venimos haciendo de unos años a esta parte, el grupo de antiguas amigas hemos estado organizando "nuestra" cena de la verbena de agosto.

Ésta que suscribe, y por variar un poco, proponía cenar fuera de Barcelona, pero, llamémosle la Sra. X, terminó convenciéndonos (y convenciéndome), de que en su piso y en su terraza estaríamos mejor y tendríamos más intimidad, aprovechando que los vecinos están fuera de vacaciones.

Por tanto, cena, charla, copas, visionar algún vídeo eros, risas, y música de baile en la penumbra de su terracita, una cálida noche de verano.



;-)

domingo, 10 de agosto de 2014

La libertad financiera. Extrañas formas de conseguirla

La verdad es que hasta que no trabajé para aquella empresa "sectaria", de la que algún día hablaré, no había escuchado la expresión Independencia Financiera.

Unos/as la consiguen mediante hábiles inversiones inmobiliarias, otros/as con productos de renta fija y/o variable que les produzcan ingresos mensuales que les permitan vivir sin trabajar (viviendo de rentas, como decía mi abuela), pero lo más extremo que he visto y leído, ahora que las Cincuenta sombras de Grey nos ha descubierto el mundo del erotismo BDSM, es el Diario (erótico) de Dees.

Al comienzo, ella nos relata sus fantasías eróticas BDSM



Pero un día, decide dejar de soñar, y meterse en ese mundo, a la vez que en su diario van quedando anotadas sus aventuras eróticas.



El mundo del BDSM termina siendo una droga para Dees, droga de la que cada vez necesita una dosis mayor, así que va pasando de dueña/o en dueña/o, sometida siempre a prácticas en las que mezcla el dolor con el placer, el sufrimiento con los orgasmos.





Según avanza la historia, vemos a Dees cambiando una y otra vez de dueño/a, atada en toda clase de posturas y prácticas BDSM, recibiendo y proporcionando placer, alcanzando incontables orgasmos, e incluso estando dentro de una nave espacial extraterrestre, en la que es estudiada por extraños seres, que le obligan a disfrutar del sexo en su presencia.
 
 
 
 
 
Y es al final, cuando Dees pasa a depender de una (otra) secta, que termina firmando un contrato de esclavitud sexual, de la cual saldrá dentro de varios años (concretamente al cumplir 40 años), y eso sí, rica y financieramente independiente.
 
 
 

¡¡ Toda una alegórica fábula de nuestra vida laboral !!


;-)


domingo, 3 de agosto de 2014

Las lecciones de la Dra. Amor

Sólo en raras ocasiones, alguien deja comentarios en los posts de este blog.
Desgraciadamente, sólo también en raras ocasiones (o sea, "raaro, raaro" que hubiese dicho Papuchi), esos comentarios son interesantes y/o publicables.
Pues bien, el último comentario incorrecto (e impublicable), apareció hace varias semanas (supongo que debido a los calores del verano) a raiz de la viñeta del post  "Real como la vida misma".

Parece que al comentarista (pues supongo que es un hombre) le interesa saber cuando utilizamos medias,  ligueros o panties.

Pues tal y como ya hice hace unos tres años, para otro asunto que surgió a raiz de una cena de empresa, y para la "tranquilidad" de alguno (al que veo "tenso", por decirlo de alguna manera), voy a explicar cuando y porqué utilizo liguero, medias autosostenibles (con banda de silicona), o panties.

  • Liguero:  Lo cierto es que es incómodo, pese a lo cual, es la mejor opción para momentos y citas "especiales", ya que, además de sujetar perfectamente las medias, ver la expresión de tu pareja, cuando tras quitarte la ropa... ¡tacháan!, te muestras unicamente con las medias y el liguero a juego, como decía el slogan de Mastercard ... ¡no tiene precio!
Eso sí, no conviene abusar de los "momentos especiales", pues como decía la abuela: "Cada día gallina, amarga la cocina", y precisamente , por ser algo poco habitual, son "especiales".

Muy elegantes, y adecuadas también para momentos especiales, pero a veces me dan la sensación (¿cierta o falsa?), de que se caen, con lo cual ... ¡al baño a recolocarlas!

  • Y finalmente, los Panties. Aunque tienen fama de ser muy poco eróticos, no estoy de acuerdo con ello, pues actualmente hay panties muy sexys.
Para el día a día, son la mejor y más cómoda de las posibilidades.

Y así, querido comentarista papanatas, finaliza esta lección de la Dra. Amor.





domingo, 27 de julio de 2014

Cosas que presientes, sin necesidad de preguntar

En esta vida, hay cosas que presientes, y creo que es mejor no pedir aclaraciones.

Bien, pues fuera como fuese, lo cierto es que me han dejado este otro comic erótico, en el que Rebecca nos cuenta otra historia lésbica, muy, pero que muy, erótica, con imágenes explicitas.




































Los colores y los cómics se hicieron para los gustos, y éste, de categoría X, tiene su punto misterio-morboso-masoquista, en lo de que una de las protagonistas (la doctora en psicología que durante un año trató a la segunda protagonista de la historia), se le ocurra ir a visitar a su ex-paciente a su casa, pensando que estará sola, y al llegar allí, descubrir que está acompañada de su antigua novia, tras lo cual, entre ésta última y su ex-paciente, después de sujetarla, la desnudan completamente, la amordazan y la atan de pies y manos en una silla, para que las vea a ellas dos, mientras hacen salvajemente el amor.
Por supuesto, la doctora es joven y guapa, tal y como exige el guión, y ya puestas, he echado en falta que, además del dildo vibrador, no le colocasen en los pezones unas pinzas con una cadenita con cascabeles, con la que ambiertarles la velada, que siempre digo que las cosas, o se hacen bien, o no se hacen.
;-) 
Hasta ahí, una pasada de historia, pero lo que creo que ya es excesivo, es lo de que tras terminar su fiestecita la parejita feliz, y a modo de "postre", se follen también a la doctora, primero la novia de su ex por delante, y después su ex, que quizás a modo de venganza y mensaje subliminal, por detrás, quedando la doctora con todo ello, contenta y feliz, por los nuevos e intensos placeres sexuales que le han descubierto, y por la forma "sutil" de haberla ayudado a salir del armario.

Lo dicho, un comic muy erótico (de hecho, porno), que tiene su punto masoquista-morboso en la secuencia de la silla, pero que al final se desmadra. De hecho, suprimiendo/cambiando esa parte, la historia hubiese sido la de una venganza mucho más retorcida, basada en someter a la doctora a un suplicio de Tántalo sexual.

En fín, que ideas y fantasías erótico-morbosas no nos faltan, y que la que tiene una amiga, y una silla (que siempre he pensado que sirven para más cosas, además de para sentarse), tiene un tesoro.

;-)